Aquí hay una verdad aleccionadora: la mayoría de las mujeres
piensan que la mayoría de los hombres son pésimos en el sexo. (Por supuesto, lo
opuesto también es cierto: la mayoría de los hombres piensan que la mayoría de
las mujeres tampoco son muy buenas). Entonces, ¿por qué es que las personas en
nuestras vidas que pueden darnos la mayor satisfacción son, para la mayoría de
la gente, vagamente insatisfactorias? La respuesta realmente radica en la falta
de educación. Al igual que en cualquier otra área de la vida, ser hábil en el
sexo necesita conocimiento y práctica. La diferencia entre ser un buen amante y
uno bueno se resume simplemente: para ser un gran amante, debes saber cómo darle
a una mujer un placer increíble. Aquí hay cuatro consejos para realmente
emocionar a tu amante durante el sexo:
Hazle el amor a su mente primero
Hazle el amor a su mente primero